No había luz, escaseaba el agua y
moscas, era un sufrimiento, dice Fidela Cruz mientras quita de su rostro sus blancos cabellos y dibuja una sonrisa.
Al pie de su casa, la de color azul en la colonia Abetos, donde habita desde hace 18 años repite constantemente lo afortunados que son, ahora que tienen drenaje. “Vamos poco a poco. Antes estaba todo feo, teníamos que mandar traer a alguien para excavar (y eliminar los desechos).
“Era bien caro nos cobraran de 600 a 700 pesos y hoy con esta obra tenemos el servicio todo bien”, afirma con singular alegría.
Para su ella y su familia se acabó la contaminación y la constante preocupación por la salud de sus hijos y nietos. Ahora pide mantener ese trabajo coordinado con las autoridades municipales para cubrir sus necesidades.
Con franqueza agradece a la alcaldesa de Pachuca. “Gracias a Yoli estamos bien, ya nos trajo el drenaje, nos echaron la mano”, y recordó entre risas que esperan las banquetas y el pavimento.
Con esa emoción de sentirse escuchada, comenzó a caminar entre calles contando cómo ha cambiado su colonia. Como guía turística de esta colonia ubicada el oriente de Pachuca, señala donde se han instalado los pozos de visita, las calles que atraviesa la tubería, las casas habitadas y en construcción que fueron beneficiadas.
Los rayos del sol se vuelven cada vez más intensos y tras caminar cuatro calles se detiene al pie de una casa de zaguán gris de donde sale una mujer joven que exclama: ¡Estoy lavando!
Fidela saluda a María Remedios Carrera, de 37 años de edad. Detrás de ella, asoma su carita Dulce Estrella, su hija de apenas un año, que al parecer acaba de despertar y ha perdido un zapato. Remedios la toma entre sus brazos y dice que es la menor de otras dos hijas que tiene, una de 13 y la mayor de 18.
Cuando llegó a la colonia Abetos “no había servicios, no había nada, había puras zanjas, no teníamos luz, ni agua. El drenaje es lo que más nos interesaba pues había que ver dónde tirar el agua, sacar los desechos a la calle y era incómodo con los niños”, dijo.
“Allá arriba si tenían drenaje y toda el agua sucia se nos venía acá, era preocupante. Mis vecinas me comentan que sus niños se llegaron a engranar por el polvo, el agua sucia que se seca y ahorita gracias a dios ya vamos progresando”, dijo.
Tras largas entrevistas con funcionarios y la alcaldesa “Yoli Tellería, logramos recibir su apoyo”.
Remedios aseguró que ella y sus vecinos seguirán luchando por contar con todos los servicios, pidiendo también a la alcaldesa que “no se olvide de nosotros que todavía falta trabajo por hacer”.
Así como estas dos mujeres las historias se guardan detrás de cada puerta de esta colonia Abetos, que el jueves por la tarde y sin protocolos, la alcaldesa Yolanda Tellería Beltrán entregó la obra a los habitantes.
“Este es un equipo de trabajo comprometido con estar cerca de la gente para escuchar y ver por sus necesidades. Y lo seguiremos haciendo durante estos cuatro años”, dijo la alcaldesa.
Les recordó que es difícil que un gobierno apueste por este tipo de obras por ser subterráneas; sin embargo, destacó la importancia que conlleva al beneficiar a 524 habitantes brindando mejores condiciones de vida y salud, factores trascendentes para el municipio y su desarrollo.
Eduardo Sánchez, secretario de SOPDUVM explicó durante el evento que fueron mil 400 metros de tubería pvc, a lo largo de cinco calles: Pirules, Fresno, Álamo, Ocote y Roble, 19 pozos de visita y 131 descargas domiciliares con un gasto total de un millón 217 mil 694 pesos. Hidalgo Sport.
