Hidalgo Sport. Medio Tiempo.- La disyuntiva entre volver a pelear o retirarse no se debe a las dudas que Juan Manuel Márquez pueda tener, sino al permiso que espera le dé su esposa para continuar.
El “Dinamita” dijo que le ilusiona un quinto campeonato mundial en distintas divisiones, pero aclaró que desde antes de la pelea del sábado pasado contra Manny Pacquiao, ya le había prometido a su esposa e hijos que el siguiente paso sería el retiro.
“Llegué de regreso aquí a la Ciudad de México, le comenté y le dije ‘dame chance de una pelea más’ y me dijo que no, ‘tú ya quedaste que te vas a retirar’, y todavía estoy pidiéndole que me dé chance una pelea más, que se arrepienta y me diga que sí”, expresó esta tarde en conferencia de prensa, en un hotel de la zona de Polanco.
Sin embargo, no mencionó a Pacquiao como el rival que le gustaría enfrentar, pues aclaró que eso estaría por verse, aunque sí mencionó que le encantaría presentarse otra vez en el Distrito Federal.
De cualquier modo, se dijo satisfecho y feliz porque vencer claramente al filipino era lo único que le faltaba en su carrera. Esa alegría se completó este día por el anuncio que hizo la Comisión Atlética de Nevada, en el sentido que los exámenes antidoping de ambos peleadores salieron negativos.
Así pudo desmentir al entrenador de Pacquiao, Fredie Roach, quien había sugerido que el mexicano había consumido sustancias prohibidas para moldear el cuerpo con el que se presentó el sábado en Las Vegas.
“Fredie Roach había dicho ‘le voy a besar el trasero si su cuerpo está limpio’, y yo dije que no me iba a besar nada más eso, no te digo lo demás porque no lo quise decir, simplemente a mí no me gusta estar hablando, simplemente voy a los hechos”, afirmó el “Dinamita”.
A casi una semana de distancia, Márquez reveló el secreto del derechazo con que fulminó a Pacquiao al mencionar un golpe que practicó durante cuatro meses.
Para ello siempre tuvo en cuenta una finta del filipino que lo hizo caer a la lona en tres ocasiones previas. Sin embargo, esta vez no cayó en el juego del asiático.
“Si ese golpe llevaba 100 kilos de potencia, con el impulso que él iba a hacia adelante se fue como a 300 o 400 kilos, entonces no fue por casualidad, no se gana por suerte, porque muchos dijeron que fue un golpe de suerte, todo se entrena, todo se practica y de alguna manera te puede dar resultados, y el resultado nos lo dio en esta pelea”, expresó.