Hidalgo Sport. Jonatan Peña.- Matías Vuoso dio a Miguel Herrera una celebración redonda en su día de cumpleaños al marcar el gol del triunfo (2-1) ante Pumas. La inconformidad de la esposa del ‘Toro’, por la escasa actividad del delantero, surtió efecto y entrando de cambio fue el héroe para darle, paradójicamente, el mejor regalo a su técnico.
Las Águilas se adueñaron del esférico en los minutos iniciales y no dieron respiro a los universitarios, quienes, en su planteamiento incipiente, depositaron sus esperanzas en el contragolpe, bajo los efectos de la especulación.
Rolfi probó de lejos y su disparo coqueteó el ángulo izquierdo de la cabaña visitante, dando luz verde a las emociones que se vivirían en la tarde. Con ‘toda la carne echada al asador’, fue como los pupilos de Miguel Herrera consiguieron, en la siguiente jugada, la posibilidad de tomar ventaja luego de decretarse una falta inobjetable de José Antonio García sobre ‘Chema’ Cárdenas en el área.
Christian Benítez no dudó en tomar el esférico y se dispuso a tirar desde los once pasos. El grito desenfrenado y lleno de júbilo de la afición americanista fue el resultado de un cobro potente que perforó la valla de Palacios para dar la ventaja parcial.
Pumas no reaccionaba y ‘Chucho’ estuvo cerca de su segunda anotación al probar desde fuera del área, pero un manotazo salvador de ‘Pikolín II’ le impidió el festejo.
Fue cuando los felinos intentaron sacudirse el dominio ya con los estragos del gol en contra y con un primer tercio del encuentro transcurrido. A través de la vía del toque estructurado, la garra que hasta ese momento no habían puesto y un mejor ‘pressing’, lo fueron logrando y nivelaron las acciones.
Antes de decretarse el descanso, la escuadra de Guillermo Vázquez tuvo su primer opción de gol, pero una gran atajada de Muñoz con la pierna, tras cabezazo certero de Marco Palacios, obstruyó el deseo del empate.
El cuadro azulcrema volvió a ser mejor al reanudarse las acciones, aunque careció de contundencia. Bajo este ritmo, los universitarios encontraron la posibilidad del empate luego de que el árbitro central volviera a ser protagonista y sancionara un empujón de Pimentel a Martín Bravo en el área.
Juan Carlos Cacho fue el encargado de cobrar la pena máxima con éxito al engañar al arquero azulcrema. El juego se abrió y llegaron las mejores emociones y ambos conjuntos buscaron la victoria; sin embargo, fueron los locales los que crearon las mejores oportunidades.
La expulsión de García, cuando se acercaba el final, fue el vaticinio del gol de la victoria americanista. Vuoso recibió un pase filtrado y definió con maestría para darle a su escuadra los tres puntos ante un rival a quien no vencían en el Azteca desde el 2008.