Hidalgo Sport. Medio Tiempo.- No habrá deportes en lo que resta del 2020, al menos no en la forma en la que estamos acostumbrados a consumirlos. No escribo esta columna con el afán de ser negativo ni pesimista, la escribo para que poco a poco veamos esta posibilidad como una verdadera opción.
La pandemia del coronavirus es un evento nuevo y está lleno de incertidumbre. Nadie, absolutamente nadie, sabe con certeza cómo seguirá desarrollándose. Lo que sí sabemos sobre el coronavirus es que es altamente contagioso y en algunos casos mortal.
Mientras siga vigente el riesgo de contagio masivo, y por ende un potencial colapso de los sistemas de salud del mundo, es impensable regresar a los deportes como los conocemos. Las diferentes ligas hacen bien en plantear escenarios para regresar a la actividad, pero entre la planeación y la ejecución hay una gran diferencia.
La pandemia ha resultado económicamente desastrosa. En Estados Unidos, en las últimas 3 semanas, más de 16 millones de personas han perdido su trabajo. En México, desde mediados de marzo, se reportan cerca de 350 mil pérdidas de empleo.
Esto apenas está comenzando y hemos visto a nivel mundial que la prioridad de los gobiernos es la salud y no la economía. Hasta que no haya estabilidad en salud, no se podrá reestablecer la economía y con ello el deporte. Así de simple.
Para las ligas lo más importante es el ingreso por derechos de transmisión. Si no hay partidos no pueden recibir ese ingreso. Un escenario que plantean ligas como la NBA y la MLB es regresar a la actividad, jugando todo en una sola ciudad y sin aficionados.
Se me ocurren muchos problemas para llevar a cabo este escenario, pero habla de la desesperación que tienen las ligas por reanudar. Si es que regresa el deporte en el 2020 será en una versión muy diferente a la que teníamos en enero.
Así preparan las fosas comunes en Nueva York, para víctimas del Covid-19 Insisto en que esta es una situación de todo el 2020, no solo del primer semestre del 2020. El ahora famoso subsecretario de salud en México, Hugo López-Gatell, mencionó que el pico de la pandemia se dará en agosto y que esta durará hasta octubre.
Con esa información, los equipos de la Liga MX, apoyados con la misma liga, deben determinar qué se va a hacer. En este momento no es necesario tomar una decisión, pueden contemplar escenarios y esperar un improbable cambio radical de la situación actual. Lamentablemente es poco probable que suceda.
La NFL es la liga que quiere salvarse del coronavirus, pero cada día veo más complicado que lo logre. Jeff Smith, un ejecutivo del condado de Santa Clara (donde juegan los San Francisco 49ers) dijo esta semana que no espera que haya partidos ahí hasta noviembre.
En el primer párrafo mencioné que realmente nadie sabe cómo seguirá el desarrollo de la pandemia. Quizás Smith y López-Gatell estén equivocados, pero ellos son la autoridad y las ligas están atadas de manos a sus decisiones.
La esperanza deportiva 2020 parece caer en la improbable implementación de ciudades búnker. Para ello jugadores, entrenadores y trabajadores tendrían que dejar a sus familias para garantizar las transmisiones de televisión y con ello sus sueldos. Improbable, pero no imposible.