Hidalgo Sport. Luis Carlos León.- Cuando parecía que España había firmado una remontada con golazo incluido, cuando parecía que Portugal había sido superado por una España renovada, dejando atrás el error de David De Gea, que emulaba a Loris Karius, cuando parecía que Portugal no tenía para más, apareció él, con el siete en el dorsal y vestido de rojo hizo creer que Portugal podrá hacer más.
Con una mirada clavada a la escuadra izquierda española, un resoplido como de costumbre y una derecha por demás amaestrada, apareció Cristiano para, como siempre, hacer creer que Portugal es más de lo que es y darle el empate en contra de España.
Debe ser una costumbre el ver a CR7 tomar el rol de líder en la escuadra lusitana, pues van más de ocho años en los que es así y casi siempre demuestra el por qué.
Hasta antes de este partido, solo tenía tres goles en copas del mundo, uno en cada una de las anteriores ediciones que jugó, pero porque él y De Gea lo quisieron así, hoy empató el número de goles.
Está de más decir que si Portugal aspira a algo es, en parte, porque él está ahí, pues de lo contrario la selección ibérica no optaría por algo más allá de cuartos de final.
España retomó el sobrenombre de “La Furia”, pues a base de fuerza, sudor y un golazo de Nacho, pudo darle la vuelta al marcador, pareciera que está a años luz de aquella selección que entre 2008 y 2012 deslumbró al mundo por su buen fútbol.
Ahora, si no es Isco, es un Iniesta longevo, o tal vez Thiago Alcántara y más allá David Silva, pero nunca ellos juntos, siempre individual y por lapsos colectivos, recuperando la memoria y jugando a uno o dos toques.
Empezó el Mundial, comenzaron los juegos buenos, con dos contendientes, uno por la calidad de sus individualidades, otro por la calidad de jugador que los lidera y que será su ambición la que los motive a pasar de rondas.
El segundo día fue de Cristiano Ronaldo, porque lejos quedaron Giménez y su gol dramático o Irán y su victoria, después de 20 años.
Hoy le toca a Messi demostrar que él tampoco es un mortal, hoy le toca a él motivar a una Argentina urgida de copas, hoy le toca a Messi mostrar por qué él y Cristiano, han dominado el futbol mundial desde hace diez años.
