Hidalgo Sport. AFP.- La mexicana Madaí Pérez, con lágrimas de emoción, terminó este sábado en séptima posición en el maratón del Mundial de atletismo de Moscú-2013, con su mejor tiempo de la temporada (2h34:23), en una prueba en la que se impuso la keniana Edna Kiplagat, conservando su título de 2011.
“Estoy muy contenta, esto es un sueño. Queríamos estar entre los primeros, pero entrar entre los diez es maravilloso. Gracias a todas las personas que me apoyaron, a mis dos niños que están en México. Quiero compartir esto con todos los que están detrás de mí”, dijo temblando por la emoción y el cansancio.
En el decimotercer maratón de su carrera, Madaí Pérez, de 33 años, logró el mejor resultado de su carrera, después de haber sido undécima en el Mundial de Helsinki-2005, decimoquinta en Osaka-2007, y decimonovena en los Juegos Olímpicos de Pekín-2008.
“Me gusta la prueba de maratón. Después de tener a mi segunda niña, creo que tengo más madurez. Ahora pienso más. Estoy más tranquila, tengo más confianza. El trabajo de mi esposo (el también maratonista Odilón Cuahutle) ha sido fundamental”, apuntó sobre cómo se siente con este éxito ya como una veterana.
Madaí Pérez, nacida en Tlaxcala, ocupaba el puesto 25 en el km 1, a doce segundos de las líderes, para ir escalando posiciones (decimoséptima en el km 10, decimoquinta en el 15, decimocuarta en el 20, decimotercera en el 25, décima en el 30, novena en el 35, para acabar en séptima posición).
“En la primera parte iba despacio, porque sabía que si iba más rápido podía no acabar. Había que ser muy inteligente, tener paciencia. Le dije a mi esposo que la paciencia era la clave. Tener paciencia. Administré muy bien y entrar entre las diez primeras es muy bueno para mí”, subrayó.
En el trágico maratón de Boston del pasado mes de abril, Madaí Pérez también terminó en séptimo lugar.
Pérez no quiso fijarse nuevas metas para el futuro y prefirió celebrar lo conseguido ahora, con lo que dice que borró el mal sabor que le dejó el maratón olímpico del pasado año en Londres, donde fue decimonovena.
“Ahorita vamos a descansar y luego a pensar. Los Juegos fueron algo duro para mí, pero ya me quité la espinita”, concluyó, antes de irse a la zona de masajes para recuperarse muscularmente del gran esfuerzo de esta jornada.
El triunfo del Mundial de Moscú fue para Kiplagat, que dejó atrás a la desconocida veterana italiana Valeria Straneo, plata, cuando quedaban dos kilómetros.
La keniana se impuso con un tiempo de 2 horas, 25 minutos y 44 segundos, entrando delante de la italiana (2h25:58), su mejor registro de la temporada, mientras que el bronce fue para la japonesa Kayako Fukushi (2h27:45).
Kiplagat, de 33 años, y Straneo, de 37, dejaron atrás, pasado el kilómetro 30, a la etíope Meselech Melkamu, que acabaría abandonando, y a la japonesa Kayoko Fukushi, para hacer juntas el último tramo, antes del ataque de la keniana.
Kiplagat, que corría el noveno maratón de su vida, solo había sido vigésima en los últimos Juegos Olímpicos de Londres-2012, al quedarse atrás en los últimos 5 kilómetros al correr con fiebre.
Straneo, que lideró la carrera desde el inicio y solo soltó la primera plaza a falta de dos kilómetros, disputaba su octavo maratón y tenía como mejor resultado un octavo puesto en los Juegos de Londres-2012 y un segundo lugar en Rotterdam en 2012.
En cuarta posición entró otra japonesa, Ryoko Kizaki (2h31:20), mientras que el quinto lugar fue para la española Alessandra Aguilar (2h32:38).