Hidalgo Sport.- Gustavo Cabral se prepara para iniciar su doceavo torneo con los Tuzos del Pachuca, un equipo que ha sido su casa durante los últimos años, y en el que podría decir adiós al finalizar este semestre, después de disputar el Mundial de Clubes a mitad de 2025.
El defensor argentino, que ha sido pieza clave en el engranaje hidalguense, deja una huella imborrable tras conquistar títulos trascendentales como la Liga MX, la Liga de Campeones de la Concacaf y el subcampeonato de la Copa Intercontinental, entre otros logros destacados.
Reflexionando sobre su paso por el Pachuca, Cabral expresó estar plenamente satisfecho con los éxitos obtenidos desde su llegada al club.
“Llegué con el objetivo de hacer historia y creo que lo hemos logrado, hemos tenido grandes planteles que se han ido desarmando, y del último título de Pachuca en el Apertura 2022, solo quedo yo en el equipo”, dijo el defensa, visibilizando los cambios que ha enfrentado en los últimos años.
El argentino destacó la transición del club, con nuevos jugadores jóvenes que han subido al primer equipo y la llegada de futbolistas con experiencia, como Salomón Rondón, quien rápidamente se adaptó al estilo de juego del Pachuca.
“Todos estos cambios nos han hecho bien, y debemos seguir este camino”, añadió Cabral, mostrando su satisfacción por el trabajo colectivo que se ha realizado en la institución.
Desde su llegada al club, Cabral se ganó rápidamente la titularidad, primero con Martín Palermo como entrenador, luego con Paulo Pezzolano y, finalmente, con Guillermo Almada, bajo cuya dirección el equipo alcanzó la gloria en el Apertura 2022, coronándose campeones de la Liga MX, y posteriormente, ganaron la Liga de Campeones de la Concacaf en 2024.
Además, bajo la dirección de Almada, el Pachuca consiguió el subcampeonato de la Copa Intercontinental, el Derby de las Américas y la Copa Challenger, consolidando a Cabral como un referente dentro de la institución.
Antes de llegar al futbol mexicano, Cabral jugó siete años en la liga española, defendiendo los colores del Celta de Vigo y, brevemente, del Levante. Además, su carrera comenzó en su natal Argentina, donde debutó en el Racing Club, para luego pasar por el River Plate.
Su paso por el Pachuca, sin duda, marca el fin de una era, pero el legado del Sargento continuará en la historia de los Tuzos, cuyo éxito y liderazgo perduran.
