*La degradación del suelo es responsable del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel global
*Se beneficien a 64 mil pequeños agricultores mexicanos.
Pachuca de Soto, Hidalgo.- Ronald Vargas, secretario de la Alianza Mundial por el Suelo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), declaró que la institución a la que pertenece en conjunto con la Secretaria de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) de México desarrollaron el proyecto RECSOILMEX, el cual busca la recarbonización de los suelos del país, con la finalidad de combatir el cambio climático y sus efectos.
La propuesta se dio a conocer en el marco del 45° Congreso Nacional de Ciencias del Suelo que se realiza en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) en colaboración con la Sociedad Mexicana de la Ciencia del Suelo (SMCS), bajo la modalidad virtual.
Un suelo saludable es capaz de almacenar mayor carbono que la atmosfera y la vegetación, provee la mayoría de servicios ecosistémicos terrestres como retención de agua, prevención de erosión, mantenimiento de la fertilidad, filtración y desnaturalización de contaminantes; reciclaje de nutrientes, aumento de la actividad y diversidad de especies en la biota del suelo; reduce el calentamiento global, aumenta la resiliencia a la sequía e inundaciones; asimismo, ayuda a recobrar el equilibrio del efecto invernadero.
Sin embargo, la degradación de la tierra disminuye la capacidad de retención y almacenamiento, por lo que contribuye a la amplificación del cambio climático y sus efectos. Por ello, la FAO busca la implementación de prácticas probadas de Manejo Sustentable del Suelo (MSS) centradas en el Carbono Orgánico del Suelo (COS), las cuales ayudarían a mitigar las emisiones de gases invernaderos, mejorar la seguridad alimentaria, reducir la pobreza para los agricultores, así como cumplir los Objetivos de Desarrollo Sustentable (ODS) establecidos por la Organización de Naciones Unidas (ONU).
RECSOILMEX busca el mejoramiento de la resiliencia al cambio climático a través de la recarbonización de suelos agrosilvopastoriles en México, para lo cual se realizó el Mapa Nacional de Potencial de Captura de Carbono Orgánico en Suelo, en conjunto con productores, academia, gobierno federal y la Alianza Mundial por el Suelo (AMS).
El mapa detectó 12 clúster en todo el país para la descarbonización del suelo y fueron clasificados en tres áreas. La primera es Áreas de adaptación al cambio climático que se encuentran en alto riesgo climático y son de bajo potencial de COSseq; constituyen cultivos de maíz, alfalfa, sorgo, trigo en los estados de Sinaloa, Sonora, Tamaulipas y Guanajuato.
La segunda son Áreas de adaptación y mitigación al cambio climático en alto riesgo climático y alto potencial de COSseq, que son los cultivos de maíz, café y frutales en los estados de Veracruz, Chiapas, Campeche y Guerrero. El tercero son Áreas de mitigación al cambio climático bajo riesgo climático y alto potencial de COSseq, en donde se ubican los cultivos de maíz, café, frutales, caña y pastizales en Nayarit, Morelos, Veracruz y Chiapas.
Ronald Vargas enfatizó que el proyecto buscará gestionar una inversión de 38 millones de dólares proveniente de los recursos del Fondo Verde para el Clima (GCF), con los cuales se beneficien a 64 mil pequeños agricultores mexicanos. Asimismo, destacó que el proyecto traerá beneficios a todas las partes involucradas, permitirá el complimiento de la respetabilidad social y ambiental de los inversores, aumentará los ingresos de los productores, disminuirá el uso de agroquímico para así generar suelos más fértiles y cultivos nutritivos e inocuos.