Arturo Perea. Quien.com .- La más reciente portada de Quién presenta una exclusiva mundial: el primer vistazo a la segunda temporada de ‘Luis Miguel, la serie’, el fenómeno que hace tres años se apoderó de las pantallas. Con este estreno en puerta, Mónica Noguera contó cómo fue ser vecina de Luis Miguel cuando ella era niña y él comenzaba su carrera artística a los 12 años.
Durante el programa Qué Chulada, la conductora platicó una anécdota muy especial al momento de comentar la noticia del estreno de la segunda temporada de la serie de Netflix y, como era de esperarse, dejó sorprendidas a las anfitrionas de la emisión al escuchar que el cantante fue su compañero de juegos.
“Salía a jugar con todos nosotros cuando estábamos chiquitos, pero en un momento como que las niñas se dieron cuenta que ahí vivía y ya era un mundo de chamacas, como 100 niñas afuera de su casa”, compartió Mónica Noguera.
“(Luis Miguel) Se iba a su azotea y mi mamá lo veía: ‘Mira, ahí está Luis Miguel sentadito en la azotea viendo el sol’. Ya no podía bajar y se quedaba en la azotea viendo a la calle”, agregó.
Noguera señaló que nunca tuvo un romance con el cantante, pues en ese entonces ella tenía novio. “También (conocí) a Alex, su hermano, y Sergio era un bebé.
“Marcela Basteri, su mamá, los sacaba al parque en su carreolita y siempre estaba sola porque Luisito Rey se llevaba a Luis Miguel a trabajar, de 12 años, cuando sacó su primer disco”, agregó la conductora.
Luis Miguel, nombrado así en honor al torero Luis Miguel Dominguín, a quien Luisito tanto admiraba, nació el sábado 18 de abril en Puerto Rico. Micky pasó su primer cumpleaños, el 19 de abril de 1971, en la Ciudad de México. Luisito y Marcela le hicieron una pequeña reunión en su departamento de Xola con algunos amigos y la familia de Marco Antonio Muñiz. Hubo pastel, comida y regalos.
Tras una breve estancia en Monterrey y en Nueva York, la familia se mudó a Cádiz, España, donde nació el segundo hijo de los Gallego Basteri: Alejandro, el 25 de agosto de 1972. A pesar de su corta edad, tenía dos años y medio, Luismi aceptó muy bien la llegada de su hermanito Alejandro, quien se convertiría en su compañero de juegos.
La vida del futuro ídolo transcurrió entre España, Estados Unidos, Venezuela, Italia y México, entre otros países. Su papá cantaba y Micky, al verlo, soñaba con ser como él. Era un niño muy despierto, carismático y educado; la única guerra que les daba a sus padres era en lo referente a las materias escolares. Sólo le gustaban las ciencias naturales y las asignaturas artísticas; ni hablar de matemáticas y gramática.