Quien.com .- Renata González.- Ringo Starr , uno de los legendarios integrantes del cuarteto The Beatles, concedió una entrevista para el programa de Martha Debayle con motivo del próximo lanzamiento de su nuevo disco, Zoom In, que incluye colaboraciones con artistas como Paul McCartney, Sheryl Crow y Lenny Kravitz, entre otros.
En un momento de la entrevista, Ringo Starr aseguraba que la disolución del grupo en 1970 no ocurrió demasiado pronto. El baterista aseguró que llegó un punto en el que era necesario cambiar de rumbo pues cada uno tenía su vida… John Lennon por ejemplo, había conocido a Yoko Ono “que eso fue un cambio”, dijo. Entonces vino la inevitable pregunta de si en verdad la artista japonesa era la culpable de que los Beatles se separaran.
Ella no destruyó a los Beatles. Sí fue raro, entramos (a la disquera) EMI y había una cama en el cuarto y Yoko estaba en la cama. No sabíamos que era una artista visual, y pues sí fue raro.
“Maureen, mi esposa, si habrá ido al estudio dos horas en esos ocho años (que duró el grupo) fue mucho, y de repente teníamos a esta persona (ahí). Fui con John a preguntarle qué estaba pasando, y me dijo: ‘¿Ves cuando llegas a tu casa y Maureen te pregunta qué hiciste en el día, y generalmente le dices: Ah, sí, hicimos unas canciones, y esto y lo otro? Bueno, pues Yoko y yo queremos saber qué estamos haciendo cada segundo del día”. Y le dije: “Ah, ok, entiendo eso”, y eso es lo que estaban haciendo”.
Bed-In For Peace
A Ringo Starr le pareció muy raro ver en la cama a Yoko Ono. (©GettyImages 101010214)
Ringo Starr aseguró que la presencia de Yoko Ono no alteró la música del cuarteto Liverpool. “No fue algo que interfiriera con la música; de hecho, se unió a The Beatles cuando estábamos haciendo los ensayos para la película Get Back”, porque George se había peleado con Paul y se fue. Éramos como cuatro hermanos y tienes días buenos, muchos, y luego tienes un mal minuto”.
Martha también le preguntó si sigue en contacto con Paul McCartney. Al respecto, Ringo respondió de forma divertida: “Me tengo que esconder de él, todo el día me está molestando. No hablamos todos los días, pero somos amigos, vivimos en países diferentes. Si estamos en el mismo (país) siempre nos saludamos, probablemente cenamos.
“Las últimas dos veces, una en The O2 (en Londres) me subí a tocar con él y aquí en el estadio de los Dodgers me subí a tocar con él. Y si tengo una canción que estoy haciendo y él está en L.A., probablemente se trae su bajo y toca conmigo. Así que así es ahora, ya no es como al principio de The Beatles, que estábamos 24 horas, día y noche. Ahora tenemos más espacio”.
“No creo que haya sido demasiado pronto. Hay que entender que cuando empezamos éramos jóvenes, estábamos hasta arriba, haciendo gran música además de la vida que llevas en lo personal. Me casé, en el ’65 tuve un hijo, para los 70 ya tenía tres. John conoció a Yoko, que eso fue un cambio; George tenía su vida, entonces también todos teníamos otras cosas sucediendo (además de su carrera en la música)”.
“Tocar juntos en la cima fue lo máximo, al menos lo hicimos juntos, pero con toda honestidad pienso que era el momento correcto. Estuvimos ocho años en eso y después nos seguíamos juntando, pero ahí éramos Ringo y John; todos volvimos a usar nuestros nombres. ¿Quién se iba a imaginar que recibí una llamada un miércoles para tocar con esta banda de Liverpool que me encantaba y se fue al cielo. Haces cosas en la vida y de repente estás en el camino correcto”.
Martha se mostró sorprendida por la apariencia del ex Beatle, quien ya tiene 80 años pero que, a los ojos de la locutora, parece como de 60. Según Ringo Starr, su apariencia jovial se debe a varios factores, como su alegría de vivir. “Es hacer lo que amo hacer: amo tocar. Cuando tenía 13 y estaba enfermo en el hospital (con tuberculosis), para mantenernos ocupados durante 10 meses, una maestra entraba al cuarto con un triángulo, maracas y tambores y desde ese minuto, que sigue siendo tan grande en mi mente, sólo quise ser baterista. ¿Y qué crees? Salió bien”.
