Hidalgo Sport- Récord.- Aunque es aún incierto el tiempo en el que Raúl Jiménez pueda volver a jugar tras la fractura de cráneo que sufrió en juego de la Premier League ante el Arsenal en noviembre pasado, el delantero mexicano se dio tiempo para recordar sus inicios en el futbol.
“Desde niño tenía una obsesión: se llamaba futbol. Vivía en una casa con un buen jardín, en ese entonces me acuerdo que tenía mi uniforme de Jorge Campos. Recuerdo que salía con mis amigos a jugar a la calle, y llegaba todos días sudado a la casa. Toda mi vida fue siempre estar con una pelota”, conmemoró el Lobo mexicano en entrevista producida para Goal.com y EA Sports.
“El lugar donde nací, donde inicie mi carrera como futbolista a los cinco años en la escuelita de Cruz Azul Hidalgo. Donde inicié donde siempre me ha gustado jugar, recuerdo que salía a jugar con mis amigos a la calle y regresaba todo sudado a la casa. Siempre, siempre, toda mi vida fue estar con una pelota”, comentó Jiménez de su natal Tepeji del Río, Hidalgo.
“Siempre están ahí unidos en Tepeji, pese a que sea el partido a las 12 acá y allá sean las seis de la mañana, es algo muy bonito. Yo creo que en todo México el futbol es el deporte que más se vive”, añadió.
Jiménez continúa su rehabilitación, ya incluso pudo visitar las instalaciones del Wolverhampton para continuar su tratamiento y reveló Jiménez, parte importante para impulsarlo a seguir adelante y volver a las canchas son su esposa Daniela Basso y su hija.
“Ahora tengo una vida muy sólida con mi pareja e hija (Arya), y eso me llena de orgullo: saber que ellas están apoyándome para yo seguir dando el máximo”, reveló el también atacante de la Selección Mexicana.
