Por: Olga León Téllez
Convertido en el primer árbitro hidalguense que posee carnet internacional avalado por la Federación Internacional de Maxibaloncesto (FIMBA), Jabin Zarco Mendoza comparte este día a través de Hidalgo Sport, su inspiradora Historia de Vida.
Antes de iniciar su relato, es justo mencionar que este ejemplar personaje ha cimentado su exitosa trayectoria en dos grandiosas vertientes, estar bien consigo mismo, e intentar ser guía y ejemplo, principalmente para nuevas generaciones. Su sencillez, ligero sentido del humor y humanismo, son características que lo identifican.
MÁGICO VIAJE AL PASADO
Jabin, quien comparte que su nombre es bíblico, refleja contraste en su aspecto físico.. (alto, robusto y muy fuerte), con una sensible muestra de añoranza, melancolía y gratitud, cuando rememora sus primeros años de vida. Esos que marcaron su destino, su futuro, su vida misma.
Con la nostalgia a flor de piel, comenta que nació en Ciudad Sahagún, Hidalgo, pero por la necesidad laboral de sus padres, vivió sus primeros nueve años en Emiliano Zapata, donde acumuló entrañables recuerdos, como el olor a adobe húmedo, la convivencia con la naturaleza y los barquitos de papel sobre los charcos.
Aunque su única preocupación era disfrutar el fantástico entorno que ofrece la envidiable subsistencia del medio rural, Jabin percibía en carne propia la preocupación de sus padres, tras los estragos de una grave enfermedad y herencia de familia, que privó de la vida a varios de ellos.
Dentro de su mundo de fantasía y a pesar de su corta edad, comprendió que la cuestión salud (alimentación, emociones, activación física y buenos hábitos) serían su único sendero para procurar el cuerpo y el alma, y así lo ha cumplido hasta la fecha.
EL VALOR DE LA FAMILIA
Su familia decide ir a radicar a Tulancingo cuando contaba con 12 años de edad, en su mente tiene vigentes las palabra de su madre Delfina Mendoza Ruíz (qepd) “Sé lo que quieras, pero debes ser el mejor en lo que decidas”, al contrario de su padre, Gabino Zarco Morales, quien vislumbraba (equivocadamente) que el deporte no sería buena opción de progreso.
“Justificadamente, mi padre, que me inculcó el valor y compromiso por la vida, la fortaleza, la humildad y la perseverancia, optaba por otra profesión para mi sustento económico, pero ya había decidido que la activación física, iniciando por la salud, me llevaría a grandes niveles”, comenta Jabin.
“Con el paso del tiempo, mi padre, en memoria de mi madre reconoce que mi vida es el basquetbol, como lo demostró mi amada Delfina, que a pesar de estar delicada de salud, me envió a cumplir con mi compromiso y pasión..El basquetbol”, agrega nuestro invitado, quien profesa ejemplar admiración y respeto hacia su familia.
Aunque el recuerdo de su madre debilita su semblante, se impone la gratitud y la evoca con pronunciado cariño, le agradece la existencia, los valores y consejos.
CITA CON EL BASQUETBOL
Cuando Tulancingo adopta a la familia Zarco Mendoza, Jabin cursó su instrucción secundaria en la General 2, y remonta sus recuerdos al negocio familiar.. “los exquisitos Guajolotes, las limonadas y los tradicionales y deliciosos platillos preparados por mamá”. Argumenta emocionado.
Justo en esa época de su vida y por influencia de su hermana que ya practicaba el judo y el voleibol, tuvo su primera cercanía formal con el deporte y fue el Basquetbol, bajo la batuta de uno de los promotores más prestigiados de la época, Mario Castillo, en el club del IMSS.
“Un recuerdo imborrable es la familia Leines, enormes, eran cinco hermanos y los rivales a vencer, llegaban al Club Atenas en un “vocho”, acompañados de su mamá. Eran habilidosos, jugaban muy bien y se reconocía su talento”, enfatiza.
VIDA ACELERADA, PERO RESPONSABLE
Ser responsable fue la opción que eligió Jabin como hábito de vida, con apenas 17 años de edad y por invitación del director de la Prepa Dos, Pablo Gómez, empieza a combinar estudios con su tarea como entrenador.
También muy temprano en su existencia, llega la bendita experiencia de ser padre a los 18 años; la pequeña y amada Tania Nohemí (ahora convertida en abogada) trajo torta bajo el brazo, y con apoyo de Ernesto Salgado y Armando Zunzunegui lo contratan formalmente como entrenador en la UAEH, labor que cumplió cabalmente por lapso de 15 años.
Durante ese tiempo, asume que la profesionalización no sólo elevaría su nivel académico, sino sus posibilidades de empleo, e ingresó a la Normal Superior de Tulancingo, donde se tituló como profesor de Educación Física, junto con Rolando Montes.
“Era el año 2 mil y junto con él llegó a mi vida otro milagro, la pequeña Dana Itzel, ella es generación millennials, trae otro chip integrado, le agrada la lectura, colecciona libros desde pequeña, actualmente cursa cuarto semestre de ingeniería”, agrega Jabin, cuyo rostro se colma de orgullo y gozo cuando habla de sus retoños.
Reconoce y respeta el compromiso de la madre de sus hijas, Yolanda Martínez.
SATISFACTORIA LABOR POLÍTICA
En el 2005, Alejandro Rosas, presidente de la FEUH, lo invita a apoyar al candidato Ricardo Bravo que ganó la Presidencia Municipal de Tulancingo, concretó relevantes logros en beneficio de los habitantes, como la gestión de la primera alberca, la mejor Unidad Deportiva, la certificación nacional como Dirección de Cultura Física y Recreación, entre muchos más.
“Aprendí lo que es la democracia, el trabajo arduo, el sustento de proyectos para adquirir recursos, fue una gran experiencia laboral, extraordinario para un municipio con partido diferente al del gobierno, y con otro en la presidencia, no había privilegios ni recomendaciones, sólo trabajo”, argumenta con entusiasmo.
Con el programa de Sendero de Movilidad Alterna obtuvieron el Premio Latinoamericano, con la construcción de la ciclovía también fueron condecorados, pero su piel se eriza cuando habla de la Rehabilitación Acuática que incluyó a niños con capacidades diferentes.
Fue un proyecto que reforzó su sentido humano, su sensibilidad y le dejó gran aprendizaje. Entre muchos más logros. Además fue fundador de la Liga Regional de Basquetbol en su querido Tulancingo.
PROMOTOR EN SAN BARTOLO TUTOTEPEC
En el 2010 y por espacio de un año desempeñó importante promoción deportiva en San Bartolo Tutotepec y sus 105 comunidades, creó los Primeros Juegos Indígenas y dejó un precedente de lucha y trabajo.
DE REGRESO A TULANCINGO
Con amplio conocimiento en la educación física, sigue su tarea como entrenador y árbitro de basquetbol, dando continuidad a ésta labor que le ha permitido recorrer desde los escenarios más modestos, hasta los más relevantes, acumular anécdotas, experiencias, pero sobre todo, valiosas amistades.
LIGAS MAYORES COMO SILBANTE
“En 2017, después de un encuentro amistoso en Agua Blanca, a invitación de Miguel Ángel Villeda, que por cierto, me fracturó dos costillas, me propone la gran oportunidad de ingresar al Colegio de Árbitros de ADEMEBA.
Superar las pruebas físicas es el mayor reto en grandes ligas, así que perdí 17 kilos y no he parado, la exigencia de profesionalización y certificación es permanente y muy demandante”, comparte Jabin.
Con ese nivel, ha silbado en eventos de relevancia como el Campeonato Nacional Maxibasquetbol de Guadalajara, en partidos estelares.
EL SALTO INTERNACIONAL
Apenas en marzo de este año, durante la Primera Clínica de Certificación Nacional promovida por la Federación, se entregaron dos carnets internacionales, entre 27 árbitros, uno fue otorgado al hidalguense Jabín y otro a Gaby (Yucatán), avalados por su pertinaz y optimista trabajo.
Con esa etiqueta tiene pendiente su intervención en el Campeonato Mundial de Orlando, pospuesto para el próximo verano por la contingencia sanitaria, y en 2022 su mira está puesta en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Maxibasquetbol en Venezuela.
LA NUEVA NORMALIDAD
Para Jabin, su ingreso a la Federación Mexicana de Maxibasquetbol (FIMBA) es una oportunidad de fraternidad, de pertenecer a una gran familia que trabaja bajo otro esquema, cuyo objetivo es ser mejores personas, que con la contingencia sanitaria ha despertado conciencias y ha reforzado su esencia como seres humanos.
Al coordinador de arbitraje ADEMEBA-Hidalgo, Iván Meneses, agradece su incondicional respaldo, pero es larga la lista de personas a quienes menciona como parte de su evolución, como Fernando Pérez. Entre muchos más.
YA EN PACHUCA
Desde hace ocho años, Jabin radica en Pachuca, complementa su actividad practicando ciclismo de montaña, conviviendo en familia y compartiendo gratos momentos al lado de su actual compañera de vida Mayra Mendoza, en San Salvador. “Allá se respira tranquilidad, mágicas emociones y momentos de esperanza, además se disfruta de buena comida”, comenta Jabin visiblemente emocionado.
Su preparación en todos aspectos es actualmente su prioridad, sus sueños son enormes y sus compromisos más.
Tiene en Michael Jordan a su inspiración por su influencia mundial de entrega y profesionalismo y disfruta intensamente cada minuto de su existencia.
SUS PILARES DE SANGRE
Sus padres Delfina Mendoza Ruíz (qepd) y Gabino Zarco Morales, y sus hermanas Blanca Esthela, María de Lourdes, María de los Ángeles, Teresa de Jesús y Leticia, integran su gran y primera familia.
La complementan sus hijas Tanía Nohemí y Dana Itzel, pero su rostro denota especial emoción cuando menciona que ya es (a sus 46 años de edad) orgulloso abuelo de Aurora y Leonardo, quienes proporcionan valor agregado a su vida, lo alientan y motivan.
El es Jabin Zarco Mendoza, el primer árbitro internacional de Hidalgo, el agradecido con muchas personas que han apoyado su carrera, el enamorado del basquetbol, el virtuoso con el silbato, pero sobretodo, el ejemplar ser humano y la esperanza de México de trascender a nivel internacional dentro del arbitraje. FELICIDADES Y ENHORABUENA.