Hidalgo Sport.- Hace 72 años, en la cita de Londres 1948, el ecuestre mexicano dio lo que ha sido hasta el momento su mejor actuación en unos Juegos Olímpicos, luego de haber logrado cuatro medallas: dos oros, una plata y un bronce, hazaña que quedó marcada en la historia del deporte nacional.
El militar Humberto Mariles Cortés, quien falleció en París en 1972 a los 59 años, fue el protagonista de aquella gloria al conquistar la medalla de oro, la primera para México en la historia de la justa internacional, en el mítico estadio de Wembley, durante la prueba de salto individual montado en su caballo tuerto, Arete.
No conforme con el primer lugar, y superando todo pronóstico, el jinete oriundo de Chihuahua volvió a liderar el podio, pero en esa ocasión en la modalidad de equipos junto a Rubén Uriza, Alberto Valdés y Víctor Manuel Saucedo, tras dejar en el camino a España e Inglaterra.
Posteriormente, el conjunto mexicano, conformado por Mariles, Joaquín Solano y Raúl Campero, sumó otra presea al quedar en el tercer lugar en una ardua prueba de tres días.
Por su parte, Rubén Uriza también contribuyó en la cosecha de metales en tierras inglesas y se adueñó de la segunda plaza en salto individual, en el último día de actividades de los primeros Juegos Olímpicos que se celebraron después de la larga pausa debido a la Segunda Guerra Mundial.
México volvió al podio en la disciplina de ecuestre hasta 1980
Tuvieron que pasar 32 años para que México volviera a cosechar una medalla en ecuestre en unos Juegos Olímpicos, tras la proeza realizada en Londres 1948. El equipo nacional volvió a subir al podio en Moscú 1980.
David Bárcena, Manuel Mendívil, José Luis Pérez y Fabián Vázquez se colgaron el bronce en la prueba por equipo de tres días, luego de ser los pupilos de los jinetes que brillaron en tierras inglesas.
Meses más tarde, el 20 de noviembre, el equipo mexicano recibió de las manos del presidente José López Portillo el Premio Nacional de Deportes.