Hidalgo Sport. Agencias.- En 2013 Kansas City pasaba por uno de sus peores momentos en la NFL. Los Chiefs estaban plagados de talento de ambos lados del balón, pero la falta de un quarterback competente y buen coacheo los dejaron como el peor equipo un año antes. La llegada de Andy Reid sembró la oportunidad de regresar al Super Bowl e incluso ganarlo. Con la extensión de contrato de Patrick Mahomes, los Chiefs ahora sueñan con ser la próxima gran dinastía de la NFL.
Con su mariscal de campo estrella asegurado por los próximos 12 años, el trabajo duro de Reid apenas comienza. En una época en la que se pierden muchos jugadores temporada tras temporada en la Agencia Libre, la labor del head coach de los Chiefs será mantener la base del equipo campeón a como dé lugar.
Elementos clave a la ofensiva como Travis Kelce y Tyreek Hill están asegurados al menos hasta 2022, además Reid ha elegido bien en el Draft por lo que tiene una joven camada que puede responderle en cualquier momento. Las dudas recaen sobre el lado defensivo en donde su máxima figura, Chris Jones, ha declarado que está dispuesto a no jugar en 2020 si no le dan un contrato multimillonario.
La base del equipo de Kansas City es joven, únicamente cuatro jugadores del roster actual están por encima de los 30 años, de los cuales solo Patrick Sherman y Mitchell Schwartz son titulares. La versatilidad que le otorga la juventud de sus jugadores a Andy Reid, ha convertido a los Chiefs en una de las ofensivas más explosivas de los últimos años.
Con Mahomes asegurado y una base sólida, Kansas City puede soñar con ser un equipo de época a siete años de la llegada de Reid al mando del equipo. Con una ideología “a la antigua” la cual prioriza a su quarterback por encima de todas las posiciones, los actuales campeones de la NFL pueden mantener el ímpetu ganador y tomar el lugar que dejaron los Patriots como el conjunto más dominante de la Liga.
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