
Hidalgo Sport. Lauro Campos.- La noche del 12 de noviembre del año pasado, Tomás Balcázar presenció su investidura al recinto de los inmortales, dentro de la novena ceremonia en el Salón de la Fama.
El delantero del Guadalajara estuvo en Pachuca junto a figuras como Javier Zanetti, Arrigo Sacchi, Pavel Pardo, Sissi y la Pele Vargas, quienes vivieron en carne propia su condecoración.
En la ceremonia previa a la gran noche, el abuelo de Javier Hernández habló sobre la actualidad del balompié a nivel mundial.
“El futbol de mi época y el de ahora no ha cambiado nada, a mí me lo ha dado todo y me he entregado pensando solo en divertirme y hay que estar bien preparado porque las cosas están cada día mejor y nuestro futbol va para arriba”, manifestó.
En el acto protocolario, Balcázar fue el cuarto condecorado de la noche y en su mensaje se congratuló que se le haya tomado en cuenta para ingresar a este recinto.
“Yo le doy gracias a esta institución porque me han sorprendido tanto”, se refirió sobre el Salón de la Fama, administrada por Grupo Pachuca.
Al culminar su emotiva investidura, de entre el público presente en el auditorio Gota de Plata se escuchó un resonante “Arriba don Tomás Balcázar”.
Tomás Balcázar ganó su lugar en la inmortalidad tras su aporte durante una década (1948-1958) con el Guadalajara, con el que ganó el título de liga en la temporada 1956-1957, así como el Campeón de Campeones en 1957.