Hidalgo Sport. Marca.- El US Open está por comenzar. El último Grand Slam del año tendrá de nueva cuenta en sus pistas a Serena Williams, la mayor ganadora en la historia del tenis femenino. Con 23 títulos, nadie puede equipararse a lo conseguido por la estadounidense, quien regresa al torneo donde su leyenda inició hace 20 años.
El idilio de la menor de las Williams con los Grand Slams dio comienzo el siglo pasado. El US Open de 1999 sería testigo del nacimiento de la leyenda del tenis de la nueva era, conquistando su primer major el mismo año en el que Steffi Graf ganaría su vigésimo segundo grande, Roland Garros.
La irrupción de Serena en el deporte blanco fue a los 17 años, cuando junto a su hermana compitió en el último Grand Slam del año. En los meses previos ya había dado aviso de su talento, al adjudicarse el torneo en París e Indian Wells, en este último superando a tres top10: Lindsay Davenport (2), Mary Pierce (8) y ganar en la final a Graf.
Aunque la competencia en casa lucía prometedora para Serena, nadie podía esperar lo que ese campeonato estaba por entregar. Venció sin problemas a Kimberly Po y a la croata, Kostanic y en la tercera ronda tuvo que remar contracorriente ante la belga Kim Clijsters, a la que venció en tres sets, para después aplicar la misma dosis a la número 7 del mundo, Conchita Martínez.
La verdadera prueba llegaría en las rondas definitivas. En su camino se encontraban las mejores del circuito, incluyendo a su hermana Venus. Su primer gran rival fue Mónica Seles, la número 4 del mundo, en los cuartos de final y aunque el inició se complicó, la pudo dominar en tres sets por 4-6, 6-3 y 6-2.
La sorpresa se empezaba a labrar en la ronda de semifinales. Su hermana mayor se midió a Martina Hingis, una rivalidad que se venía gestando torneos atrás y que, con constantes declaraciones entre las tenistas, dio uno de los mejores enfrentamientos, dejando la victoria para la suiza por 6-1, 4-6 y 6-3, llegando a su tercera final consecutiva en Estados Unidos.Serena sabía que debía vengar a su hermana, pero primero tuvo que pasar por su compatriota Lindsay Davenport.
En tres sets, la menor de las Williams conseguiría el pase a su primera final de Grand Slam.La gran final sería la cumbre de toda una era. Hingis, un año mayor que Serena, no tendría respuesta ante la niña prodigio que empezó de manera letal, llevándose el primer set por 3-6.
En su intento por responder, la sueca iniciaría con ventaja, pero la habilidad de Serena la dejaría en la lona por 6-7 logrando la victoria, siendo la primera mujer afroamericana en ganar un Grand Slam desde Althea Gibson en 1958.20 años después de esa hazaña, Serena regresa con una imagen totalmente distinta a la de aquella niña. Ahora en su poder tiene 23 títulos y cada uno los ha obtenido gracias a su inconfundible tenis agresivo y pasional.
La mejor tenista de todos los tiempos se presenta en el US Open con la promesa de crecer aún más su historia en el deporte blanco.
