Hidalgo Sport.- Hace unos días recibí una cordial invitación de parte del Sr. Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, para estar presente en un evento privado en la Residencia Oficial de Los Pinos, donde volví a ver a casi todos los jóvenes que participaron en los Juegos Olímpicos de Río. También, como era de esperarse, estaban presentes autoridades, como el Secretario de Educación Pública, Lic. Aurelio Nuño, así como los Secretarios de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos y el de Marina, el Almirante Francisco Soberón quienes han apoyado oportunamente y de manera eficaz a nuestros deportistas olímpicos para que representaran a nuestro país con excelentes resultados, así como el Director General de la CONADE, el Lic. Alfredo Castillo Cervantes.
En mi opinión, la reunión tuvo momentos de suma importancia. El más destacado fue el hecho de que los deportistas olímpicos ahí presentes pudieran tener un dialogo abierto con el Sr. Presidente Peña Nieto, expresándole de viva voz su reconocimiento por los apoyos recibidos tanto de la CONADE como de las fuerzas armadas, y de igual manera expresaron su preocupación a efecto de que el deporte nacional tuviera la certeza de que los proyectos que fueron satisfactorios en el presente ciclo olímpico, mantengan ese rumbo y he sido testigo de la promesa de nuestro Primer Mandatario de que así será.
El Comité Olímpico Mexicano es una institución no gubernamental, a la que sin embargo le ha distinguido su comportamiento institucional, lo que ha quedado patente en el hecho de atender el exhorto que el Sr. Presidente de la República nos hizo para cerrar filas con la CONADE, para hacer un trabajo conjunto donde los principales beneficiados sean los deportistas para que su única preocupación, como debe ser, sea la de competir defendiendo los colores de México.
Considero oportuno mencionar, que para el COM dicha invitación no significa una nueva línea de trabajo ya que siendo una institución mexicana apegada a nuestro marco jurídico siempre ha estado pendiente de cumplir con su obligaciones, pero sí es altamente satisfactorio que el Primer Magistrado tome en cuenta las actividades del COM y se sienta identificado con los principios fundamentales de la Carta Olímpica.
Tenemos la obligación de cumplir con lealtad y solidariamente, de manera institucional al respaldar a nuestros jóvenes deportistas en las competencias que forman parte del Movimiento Olímpico Internacional; por lo que considero que la falta de comunicación en algún momento generó lagunas entre las autoridades responsables del alto rendimiento y nuestra función como legítimo representante del Comité Olímpico Internacional en México que reconoce como tal las leyes vigentes que enmarcan al deporte nacional.
También existe el sentir de que hay duplicidad de funciones, lo cual de ninguna manera puede considerarse así ya que el alto rendimiento, es responsabilidad de la CONADE y que el COM actúa en apoyo exclusivamente en dicha preparación a través del CDOM. Nuestra labor, no sólo se circunscribe a eso sino que contempla además la función diplomática y las relaciones institucionales con los diversos organismos que están amparados por el COI, entendiendo fundamentalmente las Federaciones Internacionales, y diversos organismos tanto continentales como regionales.
Una función primordial para el COM es reflejar ante esas instancias el cumplimiento de los acuerdos internacionales signados por México ante la UNESCO en 1974 y la ONU en Diciembre de 2014, lo que seguramente en algún momento por falta de información, no se ha dimensionado. Quiero dejar muy claro que no hay, ni hubo una guerra con la CONADE como se pudo interpretar erróneamente, o con su titular el Lic. Alfredo Castillo.
Indudablemente ambos hicimos públicas nuestras diferencias de opinión y forma de operar, pero eso no implica de ninguna forma una confrontación ni mucho menos una ruptura.
Al agradecer al Presidente de México su amable invitación a aceptar el diálogo, eso nos permite también, transitar por caminos positivos que acortan las distancias. A fin de cuentas, para ambas instituciones la prioridad son los atletas, quienes deben sentirse cobijados por sus autoridades federales, estatales, universitarias, y por supuesto, por tanto, por las Federaciones Nacionales y el deporte federado en pleno, como por el Comité Olímpico Mexicano.
También, quiero expresar una vez más mi reconocimiento a los deportistas que nos representaron en Río, buscando la gloria olímpica pero siempre pensando en poner muy en alto el nombre de México. Quiero recalcar mi posición en el sentido de que, nadie tiene derecho a menospreciar a un deportista que se ha sacrificado durante toda su vida, y que se ha ganado su lugar en unos Juegos Olímpicos enfrentando a los mejores deportistas del mundo y compitiendo contra ellos al máximo nivel. Para nosotros, su calificación a los Juegos representa por sí misma un motivo de orgullo.
No puedo dejar de mencionar mi preocupación permanente porque estos muchachos que ahora inician un nuevo ciclo, tengan todas las herramientas, hablando de entrenadores capacitados, personal técnico y médico con reconocidas calificaciones en su desempeño, material técnico e instalaciones acordes a un país como el nuestro.
Después de escuchar hablar al Presidente Peña Nieto, y de ver las instrucciones precisas que le ha dado al Lic. Castillo, para que trabajemos de manera conjunta y armónica, sé de antemano que habrán de venir mejores tiempos, acompañados de resultados de excelencia para los atletas olímpicos.
En un mundo convulso, pienso que un mensaje de paz como el que lleva el deporte de manera intrínseca, es de las pocas cosas que además, pueden convertirse en un motivo para exaltar la identidad nacional como lo vivimos recientemente en Río de Janeiro.
Estoy convencido de que optimizando los recursos en forma correcta, con la gente adecuada en los tiempos correctos, México en muy corto plazo, tendrá grandes satisfacciones al ver a sus atletas competir representando a un pueblo cuya síntesis histórica y deportiva es respetada en todo el mundo.
Sirva también esta colaboración para agradecer a mis queridos y respetados amigos, Don Jorge Kahwagi Gastine, el Lic. Jorge Kahwagi Macari, Don Rafael García Garza y al Dr. Francisco Báez, la invaluable oportunidad de expresarme en las prestigiadas páginas de La Crónica de Hoy, donde he sido recibido con los brazos abiertos en este periodo olímpico, y espero muy pronto tener una nueva oportunidad de llegar a ustedes, sus (nuestros) queridos lectores.