Este año Vin Diesel cumple sus bodas de plata con el cine. 25 años de un matrimonio que ha generado millones para Universal gracias a ‘Fast & Furious’ y una legión de fans que suma más de 95 millones de seguidores en Facebook. Y si bien el californiano ha participado en sagas de éxito multimillonario, no es tan exitoso como nos quiere hacer creer. ¿Por qué? Porque sus películas como protagonista absoluto se dividen entre fracasos y éxitos menores. ¿Es uno de los actores más activos en redes sociales? Sin dudas. ¿Es tan carismático que se ha metido a los fans de todo el mundo en el bolsillo? Absolutamente. ¿Es una proclamada estrella de Hollywood? Positivo. Pero… ¿su relación con el cine es tan fructíferamente millonaria como aparenta su imagen de estrella? Los números hablan por sí solos y la respuesta es que “no”. Vin es el co-protagonista perfecto en una saga de acción. Un actor secundario que consigue que sus películas hagan millones. Pero no es un protagonista de éxito… todavía.
Después de debutar a los 23 años interpretando a un enfermero en unos segundos de ‘Despertares’ (1990), Vin no conseguía que el firmamento hollywoodense escuche sus plegarias. Desesperado, se dirigió a sí mismo en ‘Strays’ (1997), un drama que incluso escribió y produjo con 10 mil dólares. Finalmente todo cambió después de que Spielberg le diera una oportunidad de morir ante las cámaras como el soldado Caparzo en ‘Saving Private Ryan’ (1998). Aunque la película con Tom Hanks fue alabada por las críticas y recaudó 484 millones en todo el mundo, evidentemente no fue gracias a Vin. A continuación, Brad Bird lo utilizó para que prestara su voz rasposa al personaje protagonista de la película animada ‘El gigante de hierro’ (1999), pero la cinta terminó provocando pérdidas de hasta 20 millones de dólares a Warner Bros.
Un año después, Vin lanzaba su primera saga con el antihéroe del siglo XXVIII, Richard Riddick, sumando tres entregas hasta ahora: la primera ’Pitch Black’ (2000) fue una película de bajo presupuesto con una recaudación mediocre; la segunda ’The Chronicles of Riddick’ (2004) sufrió pérdidas de al menos 15 millones a pesar de contar con un presupuesto astronómico, y ’Riddick’, que se estrenó nueve años después. En total, la trilogía costó 181 millones y recaudó unos 254, dando como resultado ganancias de 73 millones entre tres películas a lo largo de trece años. En resumen, no es lo que en Hollywood se considera un éxito. De ahí que le esté costando tanto a Vin poner en marcha una cuarta entrega.
Como muchos sabrán, fue gracias a ’The Fast and the Furious’ (2001) que Diesel alcanzó la fama. La película hizo 206 millones aunque en un principio Paul Walker era el verdadero protagonista. Por aquel entonces, Vin sabía que su personaje no podía existir sin su compañero y decidió alejarse rechazando aparecer en la segunda entrega y así, centrarse en ‘xXx’. Esta producción basada en el personaje de Xander Cage fue el primero de los dos únicos éxitos de taquilla que ha tenido como protagonista habiendo cosechado 266 millones sobre un presupuesto de 70, mientras su segundo y último éxito como estrella absoluta fue la comedia ’The Pacifier’ (2005), con una recaudación de 198 millones.
En 2002 estrenó ‘Knockaround Guys’ que generó pérdidas al apenas haber cosechado 12 millones a nivel internacional. En 2003 fue el turno de ’A man apart’ que fue destruida por la crítica y solo obtuvo 7 millones de ganancia. En 2006, ‘Find me guilty’ marcó la actuación más aplaudida de su carrera pero ¡solo hizo 2.98 millones en el box-office mundial! Y finalmente, dos años más tarde, la película de acción ’Babylon A.D.’ se tuvo que conformar con una ganancia de 25 millones. ¡Qué lejos de las cifras de Fast & Furious!
Pero lo cierto es que fuera del universo de los actores protagonistas, Vin Diesel es un nombre que consigue que una franquicia haga dinero. Fast & Furious se convirtió en la saga millonaria que es hoy en día tras la cuarta entrega en 2009, cuando Paul Walker y Vin Diesel regresaron juntos a meterse en la piel de sus personajes (Tokyo Drift no se podría considerar un “regreso” cuando Diesel apenas hizo un cameo). Con las cinco películas en donde aparecen los dos juntos en pantalla, la saga ha cosechado 3.500 millones, de los cuales 1.513 pertenecen a la séptima estrenada en 2015.
En resumen, sin Fast & Furious, Diesel no genera los mismos millones para las arcas de Hollywood. Sus películas como protagonista se dividen entre producciones que apenas han conseguido superar su presupuesto y las que directamente sufrieron pérdidas. No cabe duda que Vin Diesel se ha ganado su lugar en el firmamento de las estrellas con un personaje de peso como Dominic Toretto, pero no podemos olvidar que este rol no es (o no era) el protagonista absoluto de la saga, sino que hasta ahora siempre había estado acompañado de Paul Walker. De momento habrá que esperar hasta 2017 para conocer si Diesel será capaz de sacar adelante la saga él solito o si el público responderá ante la triste despedida del personaje de Brian O’Conner. De momento, las cifras hablan por sí solas y en los últimos siete años, solo ha protagonizado una película fuera de la saga veloz: ’Riddick’, a la que no le fue tan bien como muchos esperaban. De todos modos la hora de la verdad llegará el 30 de octubre cuando estrene ‘El último cazador de brujas’, su apuesta más fuerte de los últimos años con un presupuesto de 90 millones de dólares. Veremos si por fin se convierte en un protagonista absoluto de exitosos taquillazos…