Hidalgo Sport. Medio Tiempo.- “Del plato a la boca a veces se cae la sopa”, señala un dicho popular, y en Chivas se están limpiando la camisa.
Los astros se alinearon a favor del Guadalajara, pero estos no supieron aprovechar las bondades del torneo, y las ventajas que tuvieron para meterse a la Liguilla del futbol mexicano. Tuvieron una última oportunidad, y la dejaron escapar.
Chivas tenía que ganar su último encuentro, esta tarde, ante Rayados de Monterrey, para escribir la historia a su favor y meterse a la Liguilla después de un año sin conseguirlo. Se quedaron a la orilla otra vez.
Chivas no supo encontrar la forma de convertir un tanto al equipo de Carlos Barra, el cual encontró hasta el minuto 84, la puerta para eliminar a Chivas y arruinarle la fiesta, luego de un remate de Efraín Juárez, que José Antonio Rodríguez no pudo evitar.
Las derrotas de Atlas y Monarcas se conjugaron a favor del Rebaño, quien tuvo la mesa servida, pero el equipo de La Volpe no le pudo regalar una alegría a su afición, y le dejó al León el último boleto a la Fiesta Grande.
En la primera mitad, Chivas solo generó una oportunidad de riesgo, mientras que Rayados tocó la puerta en varias ocasiones, generando peligro constante.
Al final de la primera mitad, el desagradable enfrentamiento entre Patricio Araujo y Omar Bravo, sería el preludio de una eliminación que se estaba escribiendo.
En el segundo tiempo, Chivas se volcó al frente y La Volpe movió todas sus piezas, pero no supo convertir, a pesar del gran remate de Aldo de Nigris al 50’, y de otras oportunidades más que se presentaron.
Chivas volvió a fracasar, y ahora la afición deberá esperar tres largos meses para que su equipo les otorgue una posibilidad de ilusionarse. Por ahora, solo le queda dejarle en bandeja de plata el boleto a la Liguilla al León, que a pesar de su mal torneo, hizo lo suficiente para meterse, en el último tren.