Hidalgo Sport. Iván Lozada.- El nombre de Hidalgo sigue vivo en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pues pocos saben que Raúl Jiménez Rodríguez, quien juega para la selección olímpica de México, que está un paso de conquistar el oro, vio la primera luz en nuestro estado.
Efectivamente, este jovencito, nacido el 5 de mayo en Tepeji del Río de Ocampo, Hidalgo, era un desconocido en el proceso de la Selección Sub 23, hasta que el técnico Luis Fernando Tena lo convocó para el Torneo Esperanzas de Toulón, realizado del 23 de mayo al 1 de junio, previo a los Juegos Olímpicos, donde el Tricolor ganó el trofeo por primera vez.
Sin embargo, su interés por la práctica del futbol nace desde los tres años de edad, en que vio una foto de Hugo Sánchez y de la mano de su papá, le dijo, “sabes papito, cuando yo sea grande, voy a ser tan buen jugador como Hugo Sánchez Márquez”.
Raúl Jiménez papá, nacido en Hidalgo, veía que su hijo pintaba “y lo metimos a la escuela del Cruz Azul. Ahí comenzó a llamar la atención, a anotar goles y demás. Nuestra afición era cementera, no lo negamos, le íbamos al Cruz Azul”.
Sin embargo, aclara: “me tuve que venir a México junto con mi familia. La idea era que Raúl siguiera en el futbol, pero en Cruz Azul, mas cuando vimos que nos quedaba muy lejos La Noria… Je, je, je, pues lo metimos a la escuela del América. Coapa queda más cerca de la casa, y se dio”.
Fue así como Raúl fue creciendo futbolísticamente, subiendo de categorías en fuerzas Básicas del América, hasta debutar en la Primera División, apenas el torneo pasado frente al Morelia, en la fecha 12 de la fase regular, al frente de Alfredo Tena.
Su continuidad lo llevó a la Selección mexicana que participó en Toulón, previo Londres, donde terminó de ganarse el puesto en la selección olímpica, que lo mantiene a un paso de disputar el oro, en un sueño inimaginable del hidalguense.
Su contacto con su gente sólo se dio de niño y muy joven en su natal Tepeji del Río y por ello se mantiene al margen de la afición, que sólo lo conoce por su participación y por sus goles con la selección, por sustituir recientemente a Gio, pero no por sus orígenes.
Sin embargo, será un orgullo para los hidalguenses tener a un paisano en Londres, que está a punto de escribir la página más importante para su persona y para su estado, con la conquista de un posible oro, aunque la plata nadie se la quita.