Hidalgo Sport. Roberto Martínez.- El Corinthians es el nuevo campeón de América. El llamado ‘Equipo del pueblo’ en Brasil venció a Boca por 2-0 con gol de Emerson Sheik en el estadio Pacaembú y sucede en el trono al Santos de Neymar. Es el primer título continental del ‘Timao’, hasta este miércoles, un grande sin corona.
El partido no pasará a la posteridad más que por su significado. Es que existen dos maneras de intentar hacer realidad los grandes sueños. Arriesgar para conseguirlo, o esperar la oportunidad para lograrlo. Tanto Corinthians como Boca eligieron la segunda opción y el partido decisivo de la Copa Libertadores 2012 se jugó en su mayor parte con el freno de mano puesto. Tanto es así, que en los primeros 45 minutos apenas hubo un remate al arco. De Alex, antes del primer cuarto de hora. Orión retuvo el disparo en dos tiempos.
El arquero de Boca fue protagonista de una acción a los 27 minutos que acabó dejándole fuera del partido. Salió a cortar un avance peligrosísimo de Emerson Sheik, y al arrojarse a buscar el balón su rodilla izquierda colisionó con los tacos de la bota derecha de Leandro Somoza y quedó fuera de combate. En su lugar entró el uruguayo Sebastián Sosa, arquero que jugó la final de la pasada edición de la Copa Libertadores con Peñarol de Montevideo frente al Santos, y también la perdió.
A los 53 minutos se empezó a definir la final. Tiro libre indirecto desde la derecha para el Corinthians. Ejecutó Alex, peinó Jorge Henrique en el vértice del área grande hacia atrás. La pelota, bombeada, le cayó a Danilo, quien mal perfilado para rematar, se dio cuenta de que entraba Emerson Sheik por la izquierda. De espaldas, aplicó un taco como recurso y le salió una asistencia. Emerson, solo delante de Sosa, fusiló al arquero y puso en ventaja al ‘Timao’. 1-0.
El gol se le atragantó a Boca, que lució espeso y carente de raza. Abúlico. Sin más argumentos para complicar al rival que las jugadas de estrategia. Y ni siquiera desde las acciones a balón parado Boca logró llevar zozobra al fondo corintiano. Ni Erviti, ni Ledesma, ni Riquelme funcionaron. Tampoco cambió algo con la entrada de los delanteros Cvitanich y Viatri desde la banca. Boca naufragó sin hacerle ni cosquillas al equipo de ‘Tite’.
A los 72 minutos Emerson Sheik dejó la final vista para sentencia. Rolando Schiavi falló un pase de manera inadmisible. El atento y veterano delantero brasileño robó la pelota, escapó del intento de obstaculizar de Caruzzo, y definió cruzado, abriendo el pie derecho, para alejar la pelota ante la desesperada salida de Sebastián Sosa. 2-0.
El Corinthians se consagró con las armas que le habían llevado a la finalísima. Solidez defensiva. Intensidad en toda la cancha. Concentración. Y contundencia en los momentos puntuales. Cabe destacar que su arquero Cassio no tuvo casi trabajo en toda la noche. Sólo se vio obligado a contener un remate de cabeza de Caruzzo en una falta botada por Riquelme y un disparo de Silva muy cerca del final del partido.
Puntos álgidos en el campeón, el propio arquero Cassio, los centrales Chicao y Leandro Castán, el volante Paulinho, el mediapunta Alex y el delantero Emerson Sheik, MVP del partido por sus dos goles, carácter ganador y determinación. El Corinthians es el segundo equipo que se consagra campeón invicto de la Copa Libertadores (el primero y único hasta ahora había sido el Boca Juniors de 1978) y ‘Tite’, su entrenador, ha alcanzado un logro personal muy difícil de conquistar. Campeón invicto de la Copa Libertadores 2012 con Corinthians y campeón invicto de la Copa Sudamericana 2008 con el Internacional de Porto Alegre. Candidato de hierro a dirigir a la selección brasileña en el futuro.