Hidalgo Sport. ESPN.- La sobresaliente actuación del mexicano Sergio Pérez en Malasia logrando su primer podio en La F-1 confirma 2 cosas. La primera, que el Sauber C31 es una gran evolución del auto del año pasado y la segunda, la más importante, que Checo continúa en una curva ascendente aprovechando la experiencia que día a día obtiene en la categoría más importante del automovilismo deportivo.
Obtener un segundo lugar bajo condiciones de lluvia y llenándole los espejos a Fernando Alonso es muestra de arrojo y experiencia. Levantar el pie del acelerador y no arriesgar la segunda posición es muestra de madurez.
Si algo ha llamada la atención de la F1 es la forma tan aplicada y disciplinada del tapatío para conducir sin castigar los frenos ni los neumáticos. Manejo suave pero firme en las manos del volante azteca. Administrar los fierros es algo que sabe hacer muy bien como pocos en el “gran circo”.
El podio de Checo llega en inmejorable momento, ya que en esta semana diarios italianos postulaban una vez más al mexicano para ocupar el asiento de Felipe Massa en Ferrari. El brasileño desde su accidente hace un par de años no ha sido el mismo.
Atrás quedan las críticas a Perez el año pasado al sufrir un fuerte accidente en Mónaco, evento que lo dejó fuera las siguientes 2 carreras.
No se puede esperar que a partir de ahora Checo esté peleando por el podio en cada carrera, pero sí podemos esperar carreras inteligentes e insistentes del volante azteca. Los puntos y otros posibles podios vendrán como consecuencia.
Atrás quedo el año de novato. La exigencia para Pérez es mayor. Ya no habrá mimos ni consideraciones. Es hora de demostrar el talento y experiencia. Sergio no se aterra ante el reto y los ojos de la F1 y particularmente de Ferrari están sobre él.